Turismo en Aguilar de Campoo
Aguilar
de Campoo sorprende al viajero que visita por primera vez esta localidad. Desde la impresionante altura de su
Colegiata, al penetrante silencio de su iglesia románica o el leve susurro de
su río harán que no olvides tan fácilmente esta localidad.
Si
quieres conocer a fondo esta localidad y visitar todos los museos y espacios
expositivos, te recomendamos pasar más de un día
allí.
Cómo llegar a Aguilar de Campoo
Se llega a Aguilar de Campoo desde la Autovía A67 que une la meseta con Cantabria.
Aunque cuenta también con la carretera nacional N611.
Se encuentra en la ribera del río Pisuerga.
Ver Aguilar de Capoo en un mapa más grande
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Patrimonio histórico-artístico
El patrimonio histórico en estilo románico de
Aguilar de Campoo comprende dos iglesias románicas y las ruinas de la que fue
otra iglesia, aunque de esta última solo se conserva parte del arco de entrada
y los ábsides del presbiterio, que a inicios del siglo XIX fue traslada de la
falda de la montaña a la isla que tiene el río Pisuerga. El castillo y el
centro histórico de la villa.
Colegiata de San Miguel
La gran iglesia de Aguilar de Campoo es la Colegiata de San Miguel. Su
origen es una iglesia visigótica,
destruida por la ocupación árabe y vuelta a construir en estilo románico tardío
y protogótico. Prácticamente todos los detalles ya están realizados en estilo gótico, por
lo que se la considera más gótica que románica.
Sin duda resulta impresionante, tanto por
su construcción en sí ya que se notan 3 fases claramente diferentes románica,
gótica y renacentista; Como
por el entorno, ya que se encuentra junto a la margen izquierda del río y en un
lateral de una plaza mayor porticada con casas que se remontan a época de los reyes católicos.
En su interior. Tres naves acogen un retablo de estilo renacentista y una sillería finamente labrada en oro.
Iglesia de Santa Cecilia
En su interior. Tres naves acogen un retablo de estilo renacentista y una sillería finamente labrada en oro.
Iglesia de Santa Cecilia
Aunque muy impresionante, queremos
centrarnos ahora en la otra iglesia destacada de Aguilar de Campoo. La Iglesia de Santa Cecilia, que
se encuentra en un saliente del monte Aguilar; justo debajo del castillo
cristiano.
Recientemente ha sido restaurado, por lo que podemos disfrutar de ella en su máximo esplendor.
Esta iglesia es un ejemplo notable del románico norte de Palencia. Como casi todas las construcciones de la época, su edificación se alargó entre los siglo XII y XIII, por lo que la mayoría de los detalles románicos no son homogéneos.
Recientemente ha sido restaurado, por lo que podemos disfrutar de ella en su máximo esplendor.
Esta iglesia es un ejemplo notable del románico norte de Palencia. Como casi todas las construcciones de la época, su edificación se alargó entre los siglo XII y XIII, por lo que la mayoría de los detalles románicos no son homogéneos.
Santa Cecilia cuenta con tres naves
rectangulares de planta basilical. Esto
significa que la central es significativamente más alta. Preside la cabecera un
ábside de planta cuadrada. Esta parte destaca especialmente
sobre el conjunto, al igual que la portada.
El interior llama la atención inicialmente
la cubierta de madera finamente
restaurada y la decoración
interior, siempre tan concisa como llena de significado, rasgo
significativo del románico. En este aspecto se nota la evolución de artistas y
tiempos por la finura en la que están labrados los capiteles de las columnas.
Existen dos capiteles al inicio del crucero que son realmente prodigiosos en su ejecución. En el primero se narra la historia de la matanza de los inocentes, donde soldados vestidos a la ausencia medieval, usan sus espadas para degollar a varios infantes. El capitel de enfrente llama a la esperanza y la inmortalidad, ya que están representadas flores de acanto.
Existen dos capiteles al inicio del crucero que son realmente prodigiosos en su ejecución. En el primero se narra la historia de la matanza de los inocentes, donde soldados vestidos a la ausencia medieval, usan sus espadas para degollar a varios infantes. El capitel de enfrente llama a la esperanza y la inmortalidad, ya que están representadas flores de acanto.
La torre campanario también destaca
poderosamente para los amantes del románico, porque en esta época lo habitual
eran las
espadañas donde
varias campanas servían para llamar a misa o bien dar alarmas. Esta torre posee
una extraordinaria elegancia, con tres pisos, los dos superiores con ventanales
de gran hermosura. Toda una demostración de que el románico supo aunar
conceptos como robustez y elegancia.
Monasterio de Santa María la Real
Aguilar también posee el Monasterio de Santa María la Real sede del Centro y Fundación de Estudios del Románico
Construido entre los siglo XII y XIII, en estilo románico tardío, los muros ya poseen ventanales de transición al gótico. Durante el siglo XIV y XV al igual que Aguilar de Campoo sufrirá de las guerras civiles castellanas y la peste negra, generando una época de declive económico. Esto hace que no sufra grandes reformas arquitectónicas y que se no se den mezcla de estilos a lo largo de su historia. Gracias a esto, conservamos con bastante pureza las trazas originales.
En la restauración a mediados del siglo XX
consiguió rehabilitar los muros y las estancias monacales, por lo que se
reutilizo como instituto y finalmente como aulas talleres de restauración.
Desde 1988, con la inauguración de este centro, se culmina la iniciativa
llevada a cabo por la Asociación de Amigos del Monasterio de Aguilar.
Para visitar el Monasterio,
que es gratuito, y el museo, de pago,
los horarios son de martes a viernes de 16 a 19 h., y sábados, domingos y
festivos de 10:30 a 14 h. y de 16:30 a 19:30 h. Es posible concertar visitas en
grupo y guiadas contactando a los teléfonos: 979 123 053 y 616 994 651.
Castillo de Aguilar de Campoo
El castillo de Aguilar actualmente se conserva en ruinas. En
origen, se trataba de una torre defensiva levantada en la época de la
Reconquista, y que fue propiedad del marqués de Aguilar de Campoo.
Se trata de un conjunto defensivo con
trazas románicas. Antaño poseía dos entradas. Con arcos de medio punto,
típicamente románicos, aunque actualmente solo se mantiene una abierta, ya que
la segunda fue tapiada por su mal estado de conservación. La puerta actual está
rematada con restos de los escudos de armas del Señorío
de Tello de Castilla.
Para finalizar los imprescindibles de Aguilar de Campoo, no te puedes dejar la plaza mayor y su entorno. Esta villa está dentro del Camino de Santiago del Norte, la llamada Ruta del Besaya, fue declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1966.
Para finalizar los imprescindibles de Aguilar de Campoo, no te puedes dejar la plaza mayor y su entorno. Esta villa está dentro del Camino de Santiago del Norte, la llamada Ruta del Besaya, fue declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1966.
En el siguiente vídeo puedes conocer mejor
el castillo y las murallas de Aguilar de Campoo.
Pincha para ver el Video de AGUILAR
Pincha para ver el Video de AGUILAR
Aquilar de Campoo su Historia
Lugar
poblado por cántabros, romanos y visigodos fue
baluarte en la dominación árabe y villa de gran importancia en la Edad
Media.
El 14
de mayo de 1255, siendo rey Alfonso X el
Sabio y estando éste en Aguilar, la declaró Villa Realenga y
señaló sus términos.
Éste fue el Primer Fuero Real de Castilla (después sería Sahagún),
Éste fue el Primer Fuero Real de Castilla (después sería Sahagún),
La
villa permanecería con este privilegio hasta 1332 fue
desde entonces, cabecera de la Meryndat de Aguylar de Canpo,
una división administrativa de la Corona de Castilla, vigente
durante la Edad Media,
Pedro
de Aguilar, hijo ilegítimo del rey Alfonso XI el Justiciero y
de Leonor de Guzmán, fue titular del señorío de Aguilar
entre 1332 y 1338, y de los términos
de Liébana y La Pernía, pero habiendo fallecido este infante
siendo aún niño y sin descendencia, el Señorío de Aguilar de Campoo fue vuelto
a conceder por el mismo rey Don Alfonso XI a otro de sus hijos,
el infante Don Tello de Castilla el 10 de febrero de 1339,
que fue Conde de Vizcaya, Señor de Aguilar de Campoo, de Castañeda y de Lara,
y fundador de las villas de Marquina, Elorrio, y Guernica.
Conservó éste príncipe el Señorío de Aguilar de Campoo hasta su muerte en 1370,
año en que la soberanía sobre el Señorío de Vizcaya fue asumida
definitivamente por los reyes de Castilla. Sin embargo, tanto el Señorío de
Aguilar de Campoo como el de Castañeda fueron confirmados por los
sucesivos reyes de Castilla a los descendientes de Don Tello, siendo por
tanto dicho infante el progenitor de la casa de los marqueses de
Aguilar de Campoo.
En 1480,
los Reyes Católicos instituyeron el Marquesado de Aguilar de
Campoo (uno de los más antiguos marquesados de España) en la persona del
tataranieto del infante Don Tello, Don Garci Fernández Manrique de Lara, primer
Marqués de Aguilar de Campoo, III Conde de Castañeda y de Buelna y
Canciller Mayor de Castilla. Desde entonces, la historia de Aguilar discurre a
vida y obra de sus marqueses hasta la desaparición del Antiguo
Régimen en el siglo XIX. El título de marqués de Aguilar de
Campoo fue distinguido en 1520 con la dignidad de Grande de
España, la más alta distinción nobiliaria europea, que otorga a sus titulares
la condición de "primos" del rey y el tratamiento de
"Excelencia" así como el derecho a permanecer con la cabeza cubierta
en presencia del monarca.
En
octubre de 1517 permaneció por primera vez en Aguilar de Campoo, en
el Palacio de los Marqueses, el rey Carlos I y
futuro Emperador Carlos V y su hermana Doña Leonor, donde fueron
recibidos y agasajados por la nobleza en su primer viaje a España para tomar
posesión de la herencia de sus abuelos los Reyes Católicos.
Tras
ser elegido Emperador, Carlos V desembarcó
en Laredo (Cantabria) a su regreso de Alemania y se quedó por segunda
vez en Aguilar de Campoo en julio de 1522. Durante esta estancia visitó el
sepulcro de Bernardo del Carpio, valiente y esforzado caballero, vencedor
de la batalla de Roncesvalles, que estaba situado junto al Monasterio
de Santa María la Real, llevándose su espada, la cual se encuentra actualmente
en la Real Armería de Madrid.
A
principios del siglo XIX, Aguilar de Campoo también sufrió las
consecuencias de la invasión francesa, sobre todo el Monasterio de Santa Clara,
que fue quemado por las tropas napoleónicas.
En 1921, Miguel
de Unamuno visitó Aguilar, y escribió un artículo sobre la villa que
incluiría en su libro Andanzas y
visiones españolas.
Entre
los años 50 y 60 se construyó el embalse de Aguilar, inaugurándose
en 1963
ã Angel Cobos Vargas
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Editado el Jueves, 2 de Julio de 2015
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